#Secuoya: El post que más me ha ayudado es uno que nunca publiqué
La vida tiene paradojas sorprendentes. O quizá no tanto. Hace tres años y medio, y por consejo de mi cuñao, Emilio Sanz, el de Arqueotrip, empecé a escribir cada domingo un blog que nadie leía. El retorno de la inversión, aunque se hizo esperar, llegó. Hay alguna paradoja...