Reunión con Tyrion Lannister

 

“El señor Tyrion Lannister te espera en la sala grande”.

Las palabras de Eugenia rebotan en mi sorprendida, curiosa, y -lo reconozco- semiinconsciente cabeza.

A pesar de que me surgen muchas preguntas, me escucho a mí mismo responder “Dile que ahora mismo bajo”.

Bajé las escaleras de tres en tres, tan rápido como un cuervo de tres ojos.

Al llegar al primer piso, Eugenia me dice por lo bajinis: “Es pequeñito, lleva ropa de perroflauta y huele a vino”. “Debe ser de esos de Podemos” apostilla.

Me encojo de hombros y entro en la sala.

Efectivamente Tyrion Lannister se pasea por la sala de reuniones exactamente con los mismos andares de pato que en la tele.

Con sus ojos de dos colores y la cara que le partieron en la batalla de Aguasnegras, se me antoja más bien una versión jibarizada de David Bowie. Pero… ¿quién soy yo para opinar?

– Buenas tardes, Sr Lannister. Lo primero es lo primero: soy un gran fan suyo. Pero dígame,  ¿en qué puedo ayudarle?

– Que nos traigan unas jarritas para empezar.

Eso dice, sin mirar siquiera la tarjeta que le alargo, y se sienta de un salto en la silla.

– Pero Sr. Lannister, Yo pensaba que esto iba a ser una reunión de trabajo…

Tyrion Lannister me mira por primera vez, fijamente, con unos ojos fríos como acero valyrio.

– Siempre combino placer y trabajo. Por eso estoy tan a gustito aquí en Castilla y León: un castillo cada trecho, un bareto en cada cada calle y un puticlub cada diez kilómetros.

– Oiga, que aquí hay de todo, no sólo…

– Claro, claro, escúcheme bien, estoy muy preocupado por mi próximo fallecimiento.

– Usted quiere decir que le ayude a planificar su sucesión…

–  Quiero decir mi inminente asesinato: quiero estar preparado: en cuanto arribemos a los Siete Reinos habrá tortas por ver quién me mata primero: el menor de mis problemas es la recompensa que ofrece mi hermanita Cersei por mi cabeza.

–  Bueno, la prevención de asesinatos no es mi especialidad, pero sí le recomendaría seguir haciendo buenas migas con esos tres dragones. A ser posible, sin acercarse tanto…

En cuanto a lo de planificar su sucesión, veamos: el tema de las legítimas lo ha simplificado usted solito, digamos, por la vía rápida…. Hablo de su padre, Tywin Lannister.

– En primer lugar ese señor del que usted me habla se mereció hasta el último flechazo que le metí en el vientre. Pero además no era mi padre,  eso lo sabe cualquiera que lea un foro de teorías de la serie…

–  Entonces, ¿confirma usted las teorías que apuntan a que su madre fue forzada por el Rey Loco?,  y que ella intentó provocar su aborto sin conseguirlo y que por eso usted… usted…

– ¿Por eso soy una especie de gnomo con un cuerpo XS y un miembro XL? -se bebe una jarra de un solo trago- Bueno, contestar a eso supondría infringir un montón de acuerdos de confidencialidad firmados con la HBO, pero sí, ¡qué demonios!, lo confirmo. Ya sabe lo que hago: “yo bebo y sé cosas”.

– Me gustaría revisar esos acuerdos, pero a bote pronto no me parece muy recomendable que usted…

– “In vino veritas” decía mi septón. Así que, marchando ese vino. ¿Y qué pasa con lo mío?

– Mire, no es costumbre servir alcohol en las reuniones, esto no es Mad Men…

– Pues usted verá, me voy a Uría …

– Hold the door!! ¡¡Eugenia, bájate en un momento a por un riberita!!

–  Así se habla. Sigamos…

– Bueno, pues lo cierto es que ahora puede testar en favor de quien quiera. Como sabe, si no hace testamento, su herencia se repartirá como el cariño: entre descendientes, luego ascendientes y hermanos. La legítima de su padre alcanzaba el 50% de su herencia…

– Poco cariño he recibido de mi supuesta familia, no quería deberles ni una moneda…

– Hombre se puede decir que matar a su padre no era estrictamente necesario. Usted habría podido rebajar ese porcentaje casándose, por ejemplo. Precisamente usted tenía una relación de unión de hecho con Shae, pero en lugar de casarse…

– … la estrangulé… sí, en aquel momento, parecía lo adecuado. Y usted y muchos millones de espectadores también lo pensaron, ¿no? no me ponga esa cara, eso es lo que uno espera cuando ve la serie, ¿no?. ¡Más vino!

– Mi opinión no cuenta: además, al jugar con su padre a Guillermo Tell,  ha incurrido en causa de indignidad para sucederle y por tanto no podrá recibir ni una sola moneda, ni un solo título nobiliario de la Casa Lannister.

– No pensé en ese detalle, pero como le acabo de decir, ese viejo cabrón no era mi padre. Y no conozco a la casa Tell. Por cierto, … ¿Queda vino?

 

– Por otro lado, si revisamos el linaje Targaryen, de acuerdo con lo que usted me dice resultaría usted medio hermano de Daenerys, y una especie de tío de John Snow. En los libros también tiene un sobrino, que no sale en la serie, por lo que cabe esperar que…

– … acabe igual que mis incestuosos sobrinos, sí. Pregunte a los guionistas, o al escritor, que no pega un palo al agua.  Por cierto, respecto a mis tres sobrinos, parece que el linaje de verdad no fue un factor: Joffrey y Tommen alcanzaron el trono, sin ser Baratheons… En qué lugar deja esto a su querido derecho de sucesiones, ¿eh? ¿eh?

– Quizá por eso no haya muchos abogados en los Siete Reinos… De todos modos, es una pena que Aerys, el Rey Loco, no le reconociera su linaje…

– No sea imbécil -y pida más vino-: Tywin hubiera hecho que mi hermano Jaime o cualquier otro le hubiera matado…

– Pero es que su hermano Jaime efectivamente mató al rey loco…

– Claro, pero por otras razones. La casa Lannister siempre…

-… ya sé, ya sé, paga sus deudas.

-…iba a decir que tiene buenas razones para matar.

– En fin, Señor Lannister: usted convivía en unión de hecho con Shae. Pero la mató. Tenía “trabado” el 50% de sus bienes en favor de su padre Tywin Lannister. Pero lo mató.

Su hermana Cersei le quiere matar a usted, y respecto a Jaime Lannister, no estoy muy seguro…

Respecto a su familia política hay que tener en cuenta que usted está casado con Sansa Stark, y ese matrimonio sigue vigente.

Sansa progresa adecuadamente y usted también, cada uno por su lado… pero debe saber que están casados en gananciales y que por tanto, todo lo que ganan entre los dos les corresponde al 50%?

– Interesante, casi lo había olvidado. Sansa me cae bien.

– Ustedes podrían formar una pareja tipo los reyes católicos, uniendo el norte y el sur de Westeros. Aunque habría que eliminar a Daenerys y a John Snow de la ecuación, que no es poco (otro matrimonio probable, dada la tradición Targaryen de casarse entre familiares). No me parece mal final para la saga.

También hay que tener en cuenta la posibilidad de que su esposa fallezca lamentablemente en cualquier momento. Toda la familia Stark tiene tendencia a palmar cuando uno menos lo espera. Esto último traería consigo una liquidación de gananciales antes de la apertura de la herencia…

– Y bueno, también está el problemilla de los muertos vivientes y esos tipos azules del Norte. En fin, Daenerys y Jon también me caen bien.  Estaría bien que los cuatro llegáramos  vivos al final de la serie…. ¿Usted qué cree?.

No sé qué contestar a eso. Bueno, sí que sé, la muerte de Tyrion tiene todos los números para ser un momento para la historia en la última temporada, pero prefiero rascarme la nariz y el cuello, todo a la vez.

– Sólo soy un pobre abogado, Sr. Lannister, no depende de mí. Por cierto acabo de recordar que no me ha firmado usted mi propuesta de honorarios…

– ¡Maldito abogado pesetero! ¿No sería mejor que dejaras de escribir tonterías y fueras a jugar con tu hija, que para eso estás de vacaciones?

– Efectivamente.

Jorge García. Abogado.

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