Manual Práctico de Ayuda para Abogados
Mi amigo Alfonso Pacheco ha escrito una obra imprescindible para cualquier abogado y para cualquiera que se dedique a esto de la protección de datos personales.
“Protección de Datos: Manual Práctico de Ayuda para Abogados”
Lo vende en su propia web, en formato descarga electrónica. Y tiene pleno sentido, porque incluye una carpeta con modelos editables de todos los documentos necesarios para que el profesional pueda autocompletarlos y cumplir sus obligaciones por sí mismo.
Me hizo la merced (¡pobre inconsciente!) de pedirme que escribiera un prólogo.
Es este:
El RGPD (el “erregepedéaserejé” como dice Alfonsito) llegó en mayo de 2018 y pilló a toda España en cueros.
En especial a las atribuladas micropymes y autónomos, con casi todos los riesgos y ninguno de los recursos de las grandes empresas.
Y entre ellos, los pobrecicos abogados.
La abogacía: uno de los sectores más golpeados por la crisis, una de las profesiones más amenazadas por esa terrible tecnología que nos sustituirá por máquinas.
El abogado -especialmente el llanero solitario y el de despacho pequeño- no es famoso por nadar en la abundancia de dinero, ni menos aún en tiempo.
Y ya bastante tiene con no ser atropellado por la actualidad normativa de su propia especialidad, como para “chaparse” una disciplina “menor” y que ha cambiado completamente. Como para hacerse sus propias “coletillas” de protección de datos.
Pues año y medio después de la aplicación del “erregepedénosequé”, los abogados siguen en cueros. Y encima, sus riesgos son de los gordos, y algunas de sus problemáticas no son sencillas, precisamente.
Una solución quiero: ¡pues aquí la tienes!
Alfonsito se ha recorrido muchos colegios de abogados dando una necesitadísima formación sobre el tema como hay que darla: con la cercanía y humildad del que es uno más en la profesión, con el conocimiento directo de las circunstancias concretas del letrado en su día a día, y con mucho sentido del humor, que siempre viene bien.
Porque esto de la protección de datos, o lo amas, o es un coñazo del quince. ¡¡Había que decirlo y se dijo!!
Veinte años “en la pomada”, le contemplan y si uno lo piensa, este libro es la continuación natural de lo que viene haciendo en el blog Privacidadlogica.es junto a Javier Sempere y Luis Salvador: ayudar.
Porque les da la gana, por la filosa, por enseñar lo que saben y de paso generar debate, que siempre se aprende algo.
Pero es que además es una persona extraordinaria: Alfonsito me ha dado, en lo jurídico y en lo personal, más de una lección -no consejo, ojo: lección- en momentos delicados.
Por todo lo anterior, compañero, este libro es un regalo para ti y para toda nuestra profesión. Y también una lección “kantiana” para ambos, creo. De esas del “imperativo categórico.
Alfonsito supo desde el minuto uno que las cuatro perras que sacara con esto, no iban a pagar las horas interminables de curro, revisiones, dudas, rumiaciones, alaridos y disgustos que le ha costado escribirlo. Y aquí lo tienen.
Alfonsito te da lo que sabe que los abogados buscamos siempre y rara vez encontramos: un texto simple y directo con respuestas prácticas y claras. Que se moja. Y formularios editables para, una vez bien orientado, elegir el que aplica, completarlo y chimpún.
Y así te permite dedicarte a lo que realmente te gusta y paga tus facturas: a resolver marrones ajenos cada día.
Nada más. Y nada menos.
Jorge García Herrero
Delegado de Protección de Datos