¿Sr. Zuckerberg, compartiría con todos nosotros los nombres de las personas a las que envió mensajes la semana pasada?

Ah, mi calva sebosa brilla intensamente con cada nuevo visionado de este memorable vídeo de dos minutos: las  preguntas envenenadas que le hizo el Senador Durbin a Mark Zuckerberg hace hoy dos semanas.

En un crescendo de película, Durbin lanza a Mark tres preguntas como tres obuses.

Durbin ya se asegura la victoria al llevar el campo de batalla de su blitzkrieg particular a la privacidad del propio Zuckerberg, que no sabe por dónde salir.

El bueno de Mark opta por refrescarse su desértico y encogido gaznate, y trata de utilizar el comodín del público.

Pero todo es en vano: el viejo y pellejo Durbin no es de los que hacen prisioneros, y le apuntilla con una conclusión tan obvia como catedralicia:

Facebook siempre ha estado ahí para hacer dinero con nuestros datos, no para que controlemos la información que compartimos.

Aquí la versión subtitulada en castellano, sólo de las dos primeras preguntas.

Véanlo en bucle.

Buen fin de semana a todos.